Los primeros filósofos de la antigüedad empezaron a pensar en la naturaleza (en griego physis) como un todo. Hay que tener en cuenta que todavía no existía una idea clara de lo que era la ciencia. Con el paso del tiempo, el estudio de la naturaleza se fue especializando y en este sentido hay que indicar dos aspectos fundamentales en la comprensión de la naturaleza: la primera clasificación de los seres vivos realizada por Aristóteles y el estudio de la naturaleza en sus distintas disciplinas a partir de los científicos del periodo helenístico. Con estas dos aportaciones en el estudio de la naturaleza se inició un lento proceso de especialización. Esta idea la podemos ilustrar con lo que ha sucedido en un ámbito concreto de las ciencias naturales, en la medicina.
Hipócrates vivió en Grecia en el siglo V a. C y es considerado como el padre de la medicina. Sus propuestas iban dirigidas a mantener la salud y sanar las enfermedades desde un planteamiento global o, dicho en otras palabras, estableció los principios generales de la ciencia médica. Con el paso del tiempo, el conocimiento médico no ha dejado de especializarse en ámbitos concretos (por ejemplo, el oftalmólogo de hace unas décadas en la actualidad se ha especializado en patologías específicas de una parte concreta del ojo humano y el mismo proceso se ha dado en las distintas ramas de la medicina).
La fusión de saberes en las ciencias naturales
Las diferentes ciencias naturales no son compartimentos aislados sino que tienen conexiones entre sí e incluso conexiones con áreas del conocimiento de las ciencias sociales. Así, nos encontramos con disciplinas que representan una síntesis de dos áreas independientes (como la bioquímica, la astrobiología o la biotecnología). Paralelamente, se dan casos de fusión entre lo natural y lo social (por ejemplo, la socio-biología).
La fusión de dos ámbitos independientes del conocimiento es una realidad que obedece a la necesidad de colaboración entre las distintas ciencias, lo que en la actualidad es conocido como un planteamiento interdisciplinar. ReDefinición de Ciencias Naturales
El conocimiento de la naturaleza se estudia desde planteamientos muy diversos y el conjunto de todos ellos es conocido con una denominación genérica, ciencias naturales. De manera sintética, se puede hacer una mención de las principales ramas de las ciencias naturales (biología, astronomía, geología, química o física). Las grandes áreas de las ciencias naturales tienen, a su vez, una compleja subdivisión. Así, si tomamos como referencia la biología nos encontramos con una gran variedad de ámbitos específicos de esta disciplina (zoología, botánica, medicina, ciencias ambientales, oceanografía y un largo etcétera de ramas y sub-ramas del conocimiento de todo aquello que tiene vida).
En las últimas décadas las ciencias naturales han presentado una doble transformación: un proceso de especialización y otro de fusión de conocimientos.
Una ciencia experimental es una derivación de las ciencias naturales. Esto también se refiere a una ciencia que recurre a experimentos o situaciones preescogidas y controladas en las que el resultado en esas condiciones no es conocido. En su mayoría, las ciencias naturales son además ciencias experimentales, aunque en general la astronomía no se considera una ciencia experimental, ya que en la mayoría de los casos no es posible escoger de antemano las condiciones de movimiento de los astros. Muchas ciencias sociales pueden recurrir a experimentos: de los ejemplos, las ciencias cognitivas y la psicología frecuentemente recurren a sujetos en laboratorio que responden ante situaciones preparadas. Ciencia experimental es la ciencia que realiza experimentos con el fin de encontrar razón o cualquier modo de explicar o de hallar fenómenos físicos.
Propósitos del Área de Ciencias Experimentales
El Área de Ciencias Experimentales se conforma de 10 programas básicos y 10
programas optativos, los cuales se agrupan en 3 Academias: Física, Química y
Biología.
Los propósitos del Área son:
— Promover una actitud crítica y humanística a partir de la comprensión de la
naturaleza de estas ciencias, así como de la interpretación de la realidad a
través de los modelos explicativos de los fenómenos naturales.
— El conocimiento de las consecuencias producidas por los avances de la física,
química y Biología, en las condiciones de vida humana y del medio ambiente
que le permita asumir una actitud de compromiso y participación
— La comprensión de los conceptos y modelos explicativos más importantes y
generales en que se fundamentan estas ciencias para que los aplique en su
vida cotidiana.
— Fomentar desde las asignaturas del área, la adecuada comunicación oral y
escrita.
— Desarrollar el pensamiento lógico que le permita buscar e identificar la
información relevante de una situación dada, su interpretación y clasificación
útil.
— Plantear nuevas preguntas que exigen establecer relaciones intelectuales más
complejas.